Trastorno de la articulación temporomandibular

La articulación temporomandibular (ATM) se utiliza más que cualquier otra articulación en todo el cuerpo, lo que la convierte en un blanco fácil para los problemas de salud. Cuando estos problemas causan dolor crónico y afectan a la función general de la mandíbula, se conocen colectivamente como disfunción de la articulación temporomandibular (TMD).

Las complicaciones relacionadas con la cabeza de la articulación mandibular pueden influir significativamente en su salud dental y en su salud general.

El trastorno de la articulación temporomandibular, o TTM, se produce cuando la mandíbula y los músculos que la controlan no funcionan correctamente, lo que provoca dolor y molestias graves. El TTM puede afectar a niños, adolescentes y adultos, pero la causa exacta del TTM es a menudo difícil de determinar. Lo que sí sabemos es que los problemas de la mandíbula están estrechamente relacionados con la salud bucodental y la genética y, si no se tratan, pueden provocar daños dentales y problemas de cuello y espalda.

Los síntomas del TMD se sienten en la cabeza, el cuello y la parte superior de la espalda. La ATM, aunque está centralizada en la mandíbula, está rodeada de tendones y músculos conectivos, muchos de los cuales rodean el cráneo y llegan al cuello. Cuando el TTM es lo suficientemente grave, los síntomas pueden extenderse a otras zonas del cuerpo.

Los pacientes con TTM suelen tener problemas cuando intentan abrir bien la boca, y no es raro que la mandíbula se quede atascada en una posición abierta o cerrada. Otros síntomas pueden ser un chasquido o un estallido al morder, problemas para masticar e hinchazón facial. Si no se trata, esta tensión en la mandíbula puede provocar que se apriete, lo que provoca daños en los dientes, coronas y puentes.

El problema más común asociado al TTM es un dolor sordo en la mandíbula que aparece y desaparece, pero también está relacionado con problemas de cuello y espalda, trastornos del sueño y estrés crónico. Estos problemas interfieren en la vida diaria y pueden afectar a la capacidad de realizar actividades normales con comodidad. En algunos casos leves, los síntomas del TTM se alivian con simples prácticas de autocuidado, pero si los síntomas son persistentes, la mejor opción es el tratamiento profesional.

Opciones de tratamiento para los TTM

Existen diversos métodos para tratar los TTM, que se dividen en dos áreas:

No quirúrgico: Las opciones mínimamente invasivas incluyen medicamentos antiinflamatorios, aplicación de esteroides, aparatos orales y fisioterapia. Estas técnicas se centran en la reducción de las molestias y en el reentrenamiento de los músculos para que funcionen correctamente. Si los músculos, los tendones y la articulación pueden calmarse y corregirse, los pacientes pueden recuperar la función de la mandíbula.

Quirúrgico: Si los procedimientos no quirúrgicos no son suficientes, la cirugía puede ser la mejor solución. El cirujano oral puede realizar este tratamiento de varias maneras. Se pueden eliminar los restos y el tejido dañado, restaurando el rango completo de movimiento; o bien, se pueden ajustar y alterar los tejidos conectivos y añadir material adicional para reforzar la zona.

Dado que el TTM afecta a la salud bucodental y a su comodidad diaria, se recomienda un tratamiento profesional en un dentista como clínica dental Centro Luzida para restablecer su salud a largo plazo. Un profesional de la odontología especializado en procedimientos bucomaxilofaciales puede evaluar sus síntomas y determinar si se deben a la ATM o a alguna otra causa, y qué tratamiento sería el más beneficioso.